Jon Bon Jovi No se cree un cantante de Rock

Jon Bon Jovi, el líder y vocalista de la popular banda estadounidense de rock Bon Jovi, cree que no es un cantante de rock, sino una persona que entretiene.

"No me considero un cantante de rock. Me considero una persona que entretiene. Llegar (a ser famoso) fue una cosa, y fue divertido. Pero mantenerse es lo difícil", sostuvo el artista en entrevista con la revista Wikén, del diario chileno El Mercurio.

El alma del grupo de Nueva Jersey, que cumplirá el próximo año 20 años de carrera y ha ofrecido más de 2,000 conciertos en un total de 47 países, señaló que la música actual no ofrece cabida a la posibilidad de contar historias.
"Echo de menos eso en la música de ahora. Contar historias", subrayó el intérprete de éxitos como Livin'on a prayer, Dead or alive o It's my life, en alusión a las letras que contiene su nuevo disco Bounce (Rebote), el décimo de su banda.
Esta producción tiene cierto tinte político e incluye Undivided, una canción escrita después de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos en la que se hace un llamamiento a la unidad del mundo.
El tono comprometido de la música del grupo estadounidense también está reflejado en la canción Hook me up, que narra la historia de un joven palestino aislado que intenta contactarse con el exterior a través de una vieja radio.
Para Jon Bon Jovi, de 40 años, la música debe ser liberación y dar infinitas posibilidades de soñar, por eso destaca que Bounce, contiene canciones que hablan de "hermosos perdedores".
"Me gustan estos personajes, el pobre diablo esperanzado y optimista. Siempre ha sido una profunda parte de mí, sobre todo viendo de dónde vinimos (como grupo), el obstáculo que tuvimos, incluso con éxito", sostuvo.
Agregó que muchas letras de su producción han nacido de una aguda observación sobre sí mismo.
Con 87 millones de discos vendidos en todo el mundo, la banda Bon Jovi era una de las serias candidatas a "cadáver pop" con la emergencia del rock alternativo y el grunge en los años noventa, pero Jon Bon Jovi (cantante), Richie Sambora (guitarra), David Bryan (teclado) y Tico Torres (batería) sortearon la tormenta.
"Muchos de nuestros pares cayeron al lado del camino. Nosotros de algún modo nos reinventamos", comentó, y agregó con ironía que su grupo fue uno de los primeros que sufrió la llegada del disco compacto en 1985 y con ello el surgimiento de la piratería.
Sostuvo que desde ese año las reglas cambiaron para las bandas de rock y para todo el negocio de la música comenzaron a sonar campanas de alerta.
"La piratería está lanzada, realmente fuera de control. Pero lo que vemos ahora puede cambiar en los próximos veinte años", señaló el rockero, que ofreció un concierto en el Estadio Nacional de Santiago en 1989.
Así, para el músico es fundamental Bounce, porque ofrece la oportunidad de llegar a un nuevo público y conservar los seguidores de los ochenta.
"Este disco se trata de celebrar la elasticidad, el estar vivo (...) si un chico escucha el disco pensará que es sobre baloncesto por su nombre, pero si lo escucha su madre pensará que es sobre su bebé y así ambos lo escucharán", subrayó, al tiempo que restó importancia al impacto que ha tenido la fama y el dinero en su vida.
"Es agradable saber que puedo pagar las cuentas, pero si no tienes amigotes, por ejemplo, la amistad, o también la familia, todo el dinero y la fama son una existencia miserable", indicó.